domingo, 19 de diciembre de 2010

Papá Cuéntame Otra Vez...





Papá cuéntame otra vez ese cuento tan bonito, 
de gendarmes y fascistas, y estudiantes con flequillo
,y dulce guerrilla urbana en pantalones de campana, 
y canciones de los Rolling, y niñas en minifalda.

Papá cuéntame otra vez todo lo que os divertisteis 
estropeando la vejez a oxidados dictadores,
 y cómo cantaste Al Vent y ocupasteis la Sorbona 
en aquel mayo francés en los días de vino y rosas.
Papá cuéntame otra vez esa historia tan bonita 
de aquel guerrillero loco que mataron en Bolivia, 
y cuyo fusil ya nadie se atrevió a tomar de nuevo, 
y como desde aquel día todo parece más feo.
Papá cuéntame otra vez que tras tanta barricada 
y tras tanto puño en alto y tanta sangre derramada, 
al final de la partida no pudisteis hacer nada, 
y bajo los adoquines no había arena de
 playa.
Fue muy dura la derrota: todo lo que se soñaba
 se pudrió en los rincones, se cubrió de telarañas,
 y ya nadie canta Al Vent, ya no hay locos ya no hay parias, 
pero tiene que llover aún sigue sucia la plaza.
Queda lejos aquel mayo, queda lejos Saint Denis, 
que lejos queda Jean Paul Sartre, muy lejos aquel París,
 sin embargo a veces pienso que al final todo dio igual:
 las ostias siguen cayendo sobre quien habla de más.
Y siguen los mismos muertos podridos de crueldad. 
Ahora mueren en Bosnia los que morían en Vietnam.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Cosas Chiquitas


Son cosas chiquitas
No acaban con la pobreza, no nos sacan del subdesarrollo, no socializan los medios de producción 
y de cambio, no expropian las cuevas de Alí Babá. 
Pero quizá desencadenen la alegría de hacer, 
y la traduzcan en actos. 
Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad y cambiarla, aunque sea un poquito, 
es la única manera de probar que la realidad 
es transformable...

Eduardo Galeano

lunes, 6 de diciembre de 2010

Futuro



¿Y que le diremos cuando despierte? ¿Que su optimismo es nada más que una estrofa vacía? ¿Que el sueño sólo es una infinita pesadilla? ¿Que el futuro sigue siendo futuro y que ahora, nos toca a nosotros cerrar los ojos y esperar? Tal vez, mejor no decirle nada, seguramente, ya lo sabe ...

viernes, 26 de noviembre de 2010

Presentació


Voy a cerrar los ojos en voz baja
voy a meterme a tientas en el sueño.
En este instante el odio no trabaja
para la muerte, que es su pobre dueño
la voluntad suspende su latido
y yo me siento lejos, tan pequeño
que a Dios invoco, pero no le pido
nada, con tal de compartir apenas
este universo que hemos conseguido
por malas y a veces por las buenas.
¿Por qué el mundo soñado no es el mismo
que este mundo de muerte a manos llenas?
Mi pesadilla es siempre el optimismo:
me duermo débil, sueño que soy fuerte,
pero el futuro aguarda. Es un abismo.
No me lo digan cuando me despierte.

Mario Benedetti